El mes de Av, que coincide con el caluroso verano de Israel, pasa prácticamente desapercibido para la mayoría de los judíos del mundo.
Pero la cultura judía nos trae dos fechas importantes y relevantes en este mes, que vale la pena conocer e incorporarlas como parte de nuestra vivencia cultural judía laica y humanista.
La pieza comienza con una Tfilá – plegaria, de introspección y meditación, adecuada para Tishá Beav. Sigue con el Mandato del rebe de alegrarse y finaliza con el regocijo de un freilaj que celebra el amor.
Esta evolución refleja lo que ocurre en el mes de Av: primero recordamos las tragedias nacionales, y luego celebramos la vida.
La obra es interpretada por los maestros Mario Solán en clarinete e Israel Rozen en acordeón.